No es hambre física, es emocional

Comer compulsivamente es una enfermedad causada por la incapacidad de algunas personas de canalizar sus emociones. Casi el 4 por ciento de la población mundial la padece.

Quienes padecen esta enfermedad, catalogada como desorden alimenticio e incluida en el Manual Estadístico y Diagnóstico de Enfermedades Mentales, “sufren la sensación de ser controlados por la comida”[1] y la utilizan como mecanismo para aliviar tensiones, estrés, dolor, ansiedad, o emociones en general.

Un comedor compulsivo sufre también de sobrepeso, pero su figura no es en un principio su preocupación; come mayor cantidad de alimento y en menos tiempo; sube y baja de peso continuamente; siente la necesidad de comer aunque hace poco lo haya hecho; usa la comida como recompensa o consuelo; y “desvían la función de sostenimiento que cumple la comida, por la necesidad de ingerir alimentos para poder enfrentarse a la vida”, cuenta Mariana* comedora compulsiva.

El perfil sicológico de un adicto de este tipo, según lo la ha establecido la Organización de Comedores Compulsivos Anónimos, corresponde a una persona que no es capaz de identificar cuál sentimiento lo está afectando, lo que lo lleva a experimentar una sensación falsa de hambre.

A partir de esta sensación de malestar y vergüenza, tanto física como sicológica, la ingestión compulsiva de alimentos desemboca en problemas sociales. Otro hecho relacionado con la soledad a la que se somete el comedor compulsivo, es que los excesos se presentan en privado, es decir, que se esconden para comer.

Para un adicto a la comida los alimentos compulsivos, o sea los que provocan los atracones, actúan como la droga para el drogadicto o el alcohol para el alcohólico. Sin embargo, existe el agravante de que nadie puede prescindir totalmente de la comida.

Una de las causas comunes de esta enfermedad se refiere a familias que presentan actitudes como: impedir el crecimiento individual de sus miembros en las primeras etapas de desarrollo, preocuparse desmedidamente por la apariencia física, premiar o demostrar afecto por medio de alimentos o compartir solo en horas de comida, como lo afirma el sicólogo Christian Feuchtmann. [2]

Pese a que las cifras de comedores compulsivos brillan por su ausencia, una de las pocas informaciones revela que casi el 4 por ciento de la población mundial sufre esta enfermedad[3]. Teniendo en cuenta que la comida es imprescindible para vivir, es posible que haya comedores compulsivos y aún no lo sepan.

*Imagen tomada de http://www.laopinion.com/media_archive/20060202/020306_vid-01.jpg Acceso el 19 de noviembre de 2008.

*La Organización de Comedores Compulsivos tiene dentro de sus principios el anonimato. El nombre fue cambiado por petición de la fuente.

[1]Disponible en: www.adelgace.cl/htm/temas/compulsivo.htm Acceso el 1 de noviembre de 2008.

[2]Disponible en: http://www.saludymedicinas.com.mx/nota.asp?.id=805 Acceso el 1 de noviembre de 2008. La información no es tomada literal es una fuente de consulta.

[3] Mariana Suárez Rueda. “No puedo parar de comer”, El Espectador, Jueves 16 de octubre de 2008. 13-14.

* Para mayor información Comedores Compulsivos Anónimos cuenta con la página en Internet http://www.ccacolombia.com/ allí puede encontrar el test de comedor compulsivo, los doce pasos del programa de recuperación e información de contactos para ingresar a los grupos.

De lujo a estorbo, de estorbo a basura ambiental

Los rápidos avances en la tecnología, la llamada “vida útil” y el consumismo han hecho que cada día las personas sientan con mayor frecuencia la necesidad de cambiar de computador, celular, reproductor de música, electrodomésticos y todo tipo de dispositivos que, al ser desechados, pasan a ser basura electrónica. Pero ¿cómo se está manejando este problema de desechos que afecta gravemente el medio ambiente?

Desde computadores que ahora son catalogados como de la época de los dinosaurios y grabadoras en las que abuelos y padres de pasadas generaciones escuchaban La Voz de Colombia, hasta videojuegos futuristas y celulares más modernos, hacen parte de la basura electrónica que está compuesta por el cúmulo de “aparatos eléctricos y electrónicos que caen en desuso”.[1]

Según la organización ecologista internacional Greenpeace hay tres categorías de residuos: línea blanca (lavadoras, hornos y cocinas), línea marrón (televisores y equipos de música) y línea gris (computadores, periféricos y celulares).

Hace un poco más de una década organizaciones en el mundo encendieron luces de alerta, pues la basura electrónica contiene “peligrosos contaminantes que dañan a quienes los manipulan, contaminan el medio ambiente y suponen un alto riesgo para la salud”.[2]

Como está previsto, la basura electrónica representará uno de los retos de las futuras generaciones, sobre todo en una sociedad que se denomina industrializada y hace hasta lo imposible por demostrarlo. No basta con saber que el mundo está lleno de toneladas de dispositivos que se convertirán en contaminantes electrónicos, es necesario que cada uno se proponga iniciativas individuales basadas en la reducción de lujos, que se traduce en el aumento de la salud ambiental.

[1] Disponible en: http://latekhne.itm.edu.co/index.php?option=com_content&task=view&id=182&Itemid=85. Acceso el 28 de agosto de 2008.
[2] Ibíd.

* Imagen tomada de http://www.greenpeace.org/mexico/photosvideos/photos/copy-of-basura-electr-nica-la

Sabia naturaleza

proporciona soluciones ambientales

No es un descubrimiento pensar que en los desechos, tanto de animales como de

vegetales, se encuentran una infinidad de compuestos orgánicos que pueden ser

utilizados por el hombre para mitigar, de alguna manera, los efectos nocivos que él

mismo causó en la naturaleza.

Ahora aparece un nuevo método para obtener gasolina a partir de desechos

vegetales. Si quiere saber más sobre este tema ingrese a la página

http://www.amazings.com/ciencia/noticias/051108e.html en donde encontrará

información sobre las ventajas de estas prácticas.

Ya despertamos. ¿Ahora qué?

Hace diez años, en Río de Janeiro, Brasil, presidentes, primeros ministros y monarcas discutieron sobre la salud del planeta Tierra. Por primera vez la preocupación sobre los bosques, el aire, la tierra y los mares del planeta se discutió internacionalmente.

La comunidad creó el Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático (IPCC) en 1988. Este organismo de la ONU busca profundizar en el conocimiento sobre el fenómeno del calentamiento global.

Está constituido por expertos de todo el mundo y su objetivo es dar a conocer a los gobernantes del mundo la información científica, técnica y económica disponible sobre el cambio climático, su impacto y las posibles soluciones.

Asimismo, en 1997, durante una conferencia llevada a cabo en Kioto, Japón, las naciones pactaron reducir la cantidad de gases contaminantes (emitidos por los países desarrollados en un 5.2 %). En la actualidad, un total de 141 naciones han ratificado el pacto.

Otra iniciativa importante, que es ejecutada por algunos grupos sociales, consiste en luchar para que las satisfacciones de las necesidades actuales no comprometan el acceso a la riqueza del medio ambiente de los futuros habitantes de la tierra. A esta nueva preocupación y política se le empezó a llamar “desarrollo sostenible”.

Su objetivo es lograr “un medio ambiente preservado y un uso racional de los recursos naturales, pero vinculados directamente al abatimiento de la pobreza en el mundo y a la participación ciudadana en la toma de decisiones en los desarrollos regionales”.

Con todo esto, se podría decir que NO BASTA CON ENTERARSE DEL PROBLEMA, ES NECESARIO TOMAR MEDIDAS INDIVIDUALES PARA CONTRIBUIR CON LA SOLUCIÓN.

Alguna de esta información fue publicada en otras páginas que se interesan por el tema ambiental.

Imágen tomada de www.nacion.com/.../julio/21/_Img/2092171_0.jpg

Más de calentamiento global

La responsabilidad es del hombre, no del clima

Aunque, en términos generales, los cambios en el clima corresponden a variaciones internas propias del sistema climático, otra de las razones que causa estos cambios es la actividad antrópica –resultante de la actividad humana o producida por este-.

De ahí que el calentamiento global sea definido como “un cambio en el clima atribuible directa o indirectamente a las actividades humanas que alteran la composición de la atmósfera y que se suman a la variabilidad natural del clima observada durante períodos comparables de tiempo". [1]

En ocasiones el calentamiento global y el efecto invernadero son asumidos como sinónimos, lo que constituye un error considerando las características de cada uno. Por un lado, el efecto invernadero es un fenómeno natural que permite la vida en la Tierra. “Es causado por una serie de gases que se encuentran en la atmósfera, provocando que parte del calor del sol que nuestro planeta refleja quede atrapado manteniendo la temperatura media global en +15º centígrados, favorable a la vida, en lugar de -18 º centígrados, que resultarían nocivos”. [2]

Durante millones de años, el efecto invernadero natural mantuvo el clima de la Tierra a una temperatura media relativamente estable y permitía que se desarrollase la vida.

Sin embargo, las concentraciones de gases invernadero en la atmósfera están creciendo rápidamente, como consecuencia de que el mundo quema cantidades cada vez mayores de combustibles fósiles y destruye los bosques y praderas, que de otro modo podrían absorber dióxido de carbono y favorecer el equilibrio de la temperatura.

De ahí que “el bióxido de carbono y otros contaminantes del aire se acumulen en la atmósfera formando una capa cada vez más gruesa, atrapando el calor del sol y causando el calentamiento del planeta”[3] o calentamiento global.

La principal fuente de contaminación por la emisión de bióxido de carbono son las plantas de generación de energía a base de carbón, pues emiten 2.500 millones de toneladas al año. La segunda causa son los automóviles que emiten casi 1.500 millones de toneladas de CO2 al año.

En la última década, varios modelos han intentado simular los cambios climáticos antropogénicos futuros, y han llegado a las siguientes conclusiones:

* Un calentamiento global promedio, de entre 1.5 y 4.5°C ocurrirá, siendo la mejor estimación 2.5°C.

* La precipitación global aumentará entre 3 y 15%.

* Habrá un aumento en todo el año de las precipitaciones en las altas latitudes, mientras que algunas áreas tropicales, experimentarán pequeñas disminuciones.
* El derretimiento de glaciares y sequías severas que causan mayor escasez de agua.

* Deforestación que aumenta o hace surgir desiertos.

* Huracanes y ciclones, el calentamiento hace que se evapore más agua de los océanos potenciando estos tipos de catástrofes.

* El aumento en los niveles del mar producirá inundaciones costeras.

* El trastorno de hábitats que podría llevar a la extinción muchas especies vegetales y animales, ocasionando variaciones en el ecosistema.

* Olas de calor que provocan la muerte de personas, especialmente en Europa.
* Los bosques, los campos y las ciudades enfrentarán nuevas plagas y más enfermedades transmitidas por mosquitos. (*)

Fuentes:
[1] Disponible en: http://www.greenfacts.org/es/cambio-climatico/calentamiento-global.htm. Acceso el 5 de octubre de 2008.
[2] Disponible en: http://sepiensa.org.mx/contenidos/2005/l_calenta/calentamiento_1.htm. Acceso el 5 de octubre de 2008. ”.
[3] Disponible en: http://www.nrdc.org/laondaverde/globalwarming/f101.asp. Acceso el 5 de octubre de 2008. ”.
(*)Información consultada en: http://www.cambioclimaticoglobal.com/
(*)Información consultada en: http://tematica.mercadolibre.com.co/calentamiento-global

Recomendado

Para todos los interesados en el periodismo ambiental, aquí un recomendado sobre el tema. El artículo "Periodismo Ambiental. Una realidad en alza", del autor Luis Guijarro, presenta una serie de reflexiones sobre el tema, enfocadas en el bienestar actual y el futuro de esta disciplina.

Siga el vínculo que encontrará al final y consulte este excelente documento.

http://www.mma.es/secciones/biblioteca_publicacion/publicaciones/revista_ambienta/n74/pdf/71periodismoambiental742008.pdf

Enfriamiento Global

Una nueva teoría sobre el estado actual del clima en el planeta, completamente opuesta a la del calentamiento global, toma fuerza y encarrila las preocupaciones tanto de los gobiernos como de los organismos ambientales hacia la disminución de la temperatura en la tierra.

¿Será el inicio de la moda del enfriamiento global?

En el año 2002, el investigador Timothy Patterson inició una investigación sobre el sobre el lodo depositado durante los últimos 5.000 años en el fondo de los fiordos del oeste de Canadá. Dicha investigación desembocó en la teoría de un posible enfriamiento global.

Asímismo, científicos rusos del Observatorio Principal de la Academia de Ciencias y la Nasa, aseguraron en el 2006 que la tierra “experimentará un drástico descenso de temperaturas”. [1] “El Sol entrará en un proceso de hibernación dentro de 20 ó 30 años” [2] según lo anunciado por el Centro de Investigaciones de Espacio y Ciencia (Space and Science Research Center SSRC), lo que causará una nueva "era glaciar" o la "glaciación global".

Aunque los medios de comunicación siguen centrando sus espacios informativos en el tema del calentamiento global, no debemos ignorar una problemática que ya está cerca.

[1] Disponible en: http://axxon.com.ar/not/168/c-1680128.htm. Acceso el 15 de septiembre de 2008.

[2] Disponible en: http://www.ecologiaverde.com/2008/01/11/enfriamiento-global-la-era-glaciar-se-acerca/. Acceso el 15 de septiembre de 2008.
[3] Foto de la tierra disponible en: http://www.ecoportal.net/var/storage/images/objetos_relacionados/172_4_1/272633-1-esl-ES/17241.jpg. Acceso el 15 de septiembre de 2008.